El pianista mexicano Alex Mercado edita su segundo material “Symbiosis” con la colaboración de Antonio Sánchez y Scott Colley.
(30/7/14) Ciudad de México. Entrevista por Efraín Alavez
¿Cómo evalúas los dos años que han pasado desde que realizamos nuestra primera entrevista en donde hablamos de tu álbum debut “The Watcher”?
Estos dos años los considero muy importantes porque marcan una evolución composicional, musical cuyo inicio fue la producción de “The Watcher”. Con ese material me doy cuenta que soy capaz de ser líder de un trío de jazz, que soy capaz de componer música original del agrado del público mexicano que sigue el jazz. La relativa aceptación que tuvo el proyecto de “The Watcher” me motiva a seguir adelante en esta búsqueda y a profundizarla. Considero a “The Watcher” como un escalón, un peldaño de inicio para poder comenzar a recorrer una trayectoria como líder de mi propio proyecto. A partir de ahí me cuestiono de qué sigue, cuál es la continuación del proyecto de “The Watcher” y tratando de continuar ese mismo estilo de composición, esa misma línea de producción musical comienzo a esbozar mi siguiente proyecto, a componer más, determinar de una manera más profunda cuál es mi estilo personal de composición y en ese tiempo continué estudiando mucho y profundizando mis conocimientos de la música y del concepto que quiero darle a mi música.
Llega un punto en que decides aplicar a las convocatorias del FONCA para pensar en un posible apoyo para tu segundo material discográfico.
Tuve la determinación de continuar componiendo música original. Apliqué al Programa de Fomentos y Coinversiones del FONCA y recibí el apoyo. Pensé tener músicos invitados que pudieran aportar de alguna forma diferente al proyecto y pensé en el baterista mexicano radicado en Nueva York Antonio Sánchez primero que nada porque supe que tenía la intención de participar en proyectos nacionales, como en el proyecto donde colaboró con Abraham Barrera y Aarón Cruz “Ocaso”. Le propuse que participara en mi segundo disco a trío y al aceptar fue él quien me recomendó a Scott Colley en el contrabajo con quien ha hecho una mancuerna excepcional en muchos proyectos durante mucho tiempo. Agradezco al Fondo Nacional para la Cultura y las Artes el apoyo que me brindaron para realizar este segundo álbum de estudio “Symbiosis”.
Como mencionas en el booklet, simbiosis es una forma de interacción entre dos seres que se nutren mutuamente, ¿Cúal fue la experiencia de interactuar en el estudio por primera vez con Antonio Sánchez y Scott Colley?
Ellos aceptaron la propuesta de grabar conmigo después de revisar la música. Les agradó mucho la música en primera instancia, sintieron una afinidad musical en cuanto a las composiciones que incluía el proyecto, ya que como sabes se adscribe al movimiento de jazz acústico contemporáneo al cual ellos pertenecen. Con Antonio Sánchez había tocado hace muchos años cuando éramos compañeros de generación en Berklee Collage of Music pero con Scott Colley nunca había tocado. Tuve el gusto de conocerlo previo a la grabación y de inmediato hubo una afinidad personal muy importante y que se permea en las improvisaciones e interacciones que suceden en la creación músical. Hubo una empatía entre los tres.
Cabe señalar que ellos ya tienen esa simbiosis desde hace mucho tiempo, se conocen muy bien, tanto personalmente como musicalmente favoreciendo a que se extendiera esa simbiosis conmigo. Yo tuve solamente participar e inspirarme de esa simbiosis por lo que fue mucho más facil. Se dio una interacción muy auténtica entre los tres, espontánea, natural y obviamente el entendimiento profundo que tienen de la música lo pusieron al servicio de la interpretación de cada pieza. Conozco perfectamente mis temas y ellos también se nutrían de mi visión personal interpretativa de esas piezas. Fue grabado, mezclado y masterizado en su totalidad en Estados Unidos. La grabación se realizó en Systems Two Recording Studio en Brooklyn, N.Y. bajo la supervisión del ingeniero Mike Marciano. Fue mezclado y masterizado por Dave Darlington que también colaboró en “The Watcher”.
¿Cuál es el concepto musical que envuelve a “Symbiosis”?
“Symbiosis” recopila diez canciones originales que fueron compuestas después de la producción de “The Watcher” y al ser composiciones originales se ciñen a un estilo personal que me caracteriza que toma influencia de la música clásica, del jazz contemporáneo que se está haciendo en Nueva York. En este disco se puede percibir una consolidación del estilo, es decir, que hay más homogeneidad entre las composiciones y el estilo en general del disco. Durante estos dos años esa búsqueda de lograr una composición que refleje no solamente mi forma de sentir sino la forma de sentir de todo lo que me rodea, es decir, la sociedad contemporánea o la naturaleza. Creo que este estilo toma también influencia de lo que existe alrededor de nosotros. Mi música quiero que sea una expresión de lo que voy percibiendo y que de una forma conciente yo pueda absorber todo lo que estoy percibiendo y lo pueda reflejar en mi música. En este sentido continúa el concepto de “The Watcher” que se basaba en la observación y en la recreación de la realidad y del arte como representante de esa realidad pero desde un punto de vista universal, es decir, traté de que estas composiciones fueran lo más reales posible y que se nutrieran, que realizaran una simbiosis con esa realidad de la cual yo soy parte. Desde este punto de vista trato de que mis composiciones sean sentidas. Si puedo reflejar mis sentimientos de una forma veraz, a través de mis composiciones, entonces la gente podrá sentir lo mismo que yo siento.
Como en “The Watcher”, ¿el arte del disco tiene una relación muy directa y cercana con la música de “Symbiosis”?
El arte del disco está llevado a cabo por la fotógrafa Decislava Dudeva quien me concedió la oportunidad de utilizar la sesión que hizo en Novi Sad, Serbia. Es una sesión de la cual tomo la foto principal que se llama “Simbiosis” (la foto de la portada también se llama Simbiosis). De hecho me inspiro en la foto para hacer la composición “Symbiosis” que es el segundo track del disco. La foto representa un concepto simbiótico visual muy fuerte y muy obvio. Este disco trata de unirse con el concepto visual del arte y representar una simbiosis que contagia o que sucede en todos los ámbitos artísticos, no solamente en la música sino en la fotografía y en la interacción entre seres humanos y éstos con el mundo.
PRESENTACIÓN DEL DISCO
Gracias a la Coordinación Nacional de Música y Ópera de Bellas Artes en participación con El Fondo Nacional para la Cultura y las Artes se presentará oficialmente “Symbiosis” en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes el 1 de agosto a las 19 horas. Entrada Libre (cupo limitado). Los boletos (control de acceso) estarán disponibles una hora antes del concierto en dicho recinto. Lo acompañarán en el concierto Agustín Bernal en el contrabajo y Gabriel Puentes en la batería. Germán Palomares Oviedo dirigirá unas palabras de presentación.
“Symbiosis” se presentará en la República Mexicana en una gira que comenzará en agosto el Festival de Jazz de Tamaulipas en tres ciudades:, Nuevo Laredo (7 de agosto) Tampico (9 de agosto) y Ciudad Victoria (10 de agosto). Continuará en el Festival de Jazz & Blues de Zacatecas (14 de agosto) y posteriormente en Veracruz (29 de agosto). Habrá más fechas que pronto serán anunciadas tanto en la Ciudad de México, en interior del país y en el extranjero.
