El pianista mexicano Abraham Barrera nos habla en entrevista de su
nueva producción como solista titulada “Ocaso” grabada a trío con Aarón cruz al contrabajo y Antonio Sánchez en la batería. Aquí los detalles.
La trayectoria como solista de Abraham Barrera se define tras marcar sus tendencias, influencias, estilo y forma como compositor en su primer álbum “Leyendo sueños” (que incluye música inspirada en el escultor mexicano Carlos Aguilar) y con su proyecto “Abraham Barrera Ensamble” en donde fusiona el sonido del mariachi (vihuela, trompetas, violines, batería, contrabajo y piano) para lograr la interacción tanto del jazz como del llamado “mexican style”. En su nueva producción “Ocaso” donde lo acompaña Aarón Cruz y Antonio Sánchez experimenta entre lo clásico, mexicanista y el latin jazz.
Texto: Efraín Alavez
¿Cuáles son los rasgos que caracterizan “Ocaso”?
“Ocaso” es un álbum que incluye material original grabado a trío con dos grandes músicos mexicanos, Aarón Cruz en el contrabajo y Antonio Sánchez en la batería. Siempre me ha gustado influenciarme del arte, pintura, literatura, escultura y por supuesto de la música. En este material me inspiro en la literatura de Carlos Fuentes para hacerle un homenaje. Carlos Fuentes me ha influenciado muchísimo, he conocido aspectos de México a través de su obra y eso es lo que me ha compenetrado en la historia, en los personajes del México posrevolucionario y actual. Todo lo que el plasma en sus novelas me ha marcado enormemente.
Escribí una suite en tres partes “Para la región más transparente”, “Para Aura” y “Para la muerte de Artemio Cruz”. Es una dedicatoria que hago a las tres novelas de Carlos Fuentes inspiradas en cada una de ellas. El segundo track de este disco que lleva por nombre “Para el naranjo” está inspirado en el primer cuento del libro de “El naranjo” de Fuentes, donde están los hijos de Hernán Cortés con la Malinche (quise plasmar ese mestizaje que se encuentra ahí a través de un sonido español sumado a todo el mestizaje latino que nos envuelve). Asimismo incluyo el tema “Para Macario” inspirado en el personaje de la película de “Macario” que hizo Ignacio López Tarso y “Toño San” (que es además el primer tema que compongo para este proyecto) está dedicado a Antonio Sánchez. “Ocaso”, tema que le da título a esta producción se la compuse al maestro Mario Ruiz Armengol.
Quizá me equivoque pero no recuerdo al baterista Antonio Sánchez grabando en proyectos de jazzistas mexicanos.
“Ocaso” es el primero. Le dije a Adrián Oropeza que quería hacer un disco y que había compuesto un tema inspirado en Antonio Sánchez. Antonio coincide con Adrián en una clínica y le comenta que nadie lo había invitado a grabar en México. Cuando Adrián me dice esto le comento mi intensión de grabar con él. Me puse en contacto con Antonio en abril y me contestó en junio. La ventaja es que lo conocía desde que yo estaba estudiando en la Nacional de Música. El hizo un jam session en la Superior con Rodrigo Cárdenas y Mario Patrón. Cuando me entrevisté con Antonio Sánchez vía correo electrónico le escribí esta anécdota y se dio cuenta que yo tenía claro desde mucho antes que estuviera tocando con los grandes jazzistas mi interés de realizar música en conjunto.
En cada proyecto presentas diversas personalidades musicales. ¿Cómo defines el sonido de Ocaso?
La música en este material la defino como clásico/mexicanista/latin jazz. Proponer y compartir con el público este tipo de estilo y forma de componer así como involucrar estos elementos dentro del jazz es lo que me entusiasma. Lo que me gusta mucho de este disco es que existe el espacio, la interacción y la aportación de cada músico. A la hora de tocar los tres, el llamado interplay se dio sobre todo en la improvisación. Definitivamente con grandes músicos la música siempre llega a otros niveles. Aarón Cruz fue una persona vital en el disco por la manera en cómo se sumó al proyecto y cómo tomó y apoyó la música desde los ensayos.
¿En tu perspectiva cuál ha sido el desarrollo del “mexican style”?
Hoy en día la mayoría de los jazzistas que quieren proponer algo nacional están utilizando los elementos del huapango, del son, etcétera. Lo importante de cada quien es el enfoque que le da y cómo aborda, mezcla y fusiona estos ritmos ya sea en música original o con temas populares. Hubo pioneros como Popo Sánchez, Enrique Nery, Jorge Martínez Zapata que no lo conocen mucho pero está en San Luis Potosí haciendo un arduo trabajo en esto del son huasteco y del son jarocho. En lo particular me gusta fusionar lo que estudié, música clásica, con lo mexicanista involucrando ritmos como el huapango de una manera más disonante, más propositiva, más vanguardista, más atrevida. Me gusta darle la vuelta a las cosas porque es mi personalidad, es mi esencia y es lo que quiero transmitirle al público y la verdad lo que más me interesa es que la gente me de la oportunidad de abrir sus oídos a lo que yo estoy proponiendo.
“Ocaso” estará físicamente en todas las tiendas de discos de México a finales de agosto. Por lo pronto, les presentamos el video de la sesión de grabación del tema “Toño San”
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