La Ciudad de México continúa experimentando un renacimiento cultural hombro con hombro junto con su explosiva escena de jazz.
Por Andrew Kennis
Traducción de Diana Azcona
Fotos Efraín Alavez
Ciudad de México. Silenciosamente, sin mucha fanfarria, pero segura y constante, la Ciudad de México se está convirtiendo rápidamente en uno de los lugares más buscados por músicos de jazz de renombre mundial.
Durante más de media década, un recinto creado por los arquitectos más prestigiosos de México y específicamente diseñado para el dominio acústico, ha sido anfitrión de músicos de jazz de la ciudad de Nueva York y estos han tocado para un público leal y agradecido. Zinco Jazz Club, el principal bar de jazz del país, ubicado justo en el centro histórico de la Ciudad de México, presenta regularmente actos de bandas internacionales. Jazzatlán Capital, un nuevo local de jazz en la colonia Roma (el mismo barrio que aparece en la película nominada al Oscar) ha ido un paso más allá y no solo trae espectáculos internacionales itinerantes, sino que también presenta jazz a diario. Finalmente, Contratiempo Jazz, un sitio de noticias de jazz en línea, alerta regularmente a sus muchos visitantes sobre hasta 50 actuaciones de jazz en Ciudad de México en cualquier sábado por la noche o espectáculos y conciertos que se llenan todos los demás días de la semana.
“No hay duda al respecto, la Ciudad de México se está convirtiendo en un jugador muy importante en la escena del jazz, y está creciendo a pasos agigantados”, Tim Mayer, un saxofonista veterano, que muchos críticos consideran el más talentoso del país, dijo a Contratiempo Jazz.
La historia de Mayer es interesante y, en muchos sentidos, representa lo que está sucediendo en la Ciudad de México: “Soy un refugiado económico”, bromea y se ríe a carcajadas al hablar ante sus nuevos oyentes después de una actuación en Jazzatlán Capital, mientras disfruta de uno de sus exclusivos cócteles. Mayer contó que después de que la escena del jazz se volvió increíblemente seca y los conciertos se hicieron cada vez menos frecuentes en el área de Boston donde estudió, enseñó y tocó durante mucho tiempo, decidió mudarse a Xalapa, Veracruz, para un puesto de enseñanza estable y de tiempo completo. Debido a que Xalapa es una ciudad pequeña y no atrae el mismo tipo de audiencias regulares y sedientas de jazz que la Ciudad de México reúne, Mayer viaja con frecuencia en autobús durante cinco horas a la capital para mantenerse al día con los conciertos.
La historia de Mayer no es aislada. A los músicos de jazz radicados en los Estados Unidos les resulta cada vez más difícil ganarse la vida y, si uno no se encuentra en la ciudad de Nueva York -que según algunas mediciones es la ciudad más cara de los Estados Unidos para vivir- y realiza giras de manera regular, pocos jazzistas profesionales pueden llegar a fin de mes sin también enseñar, tocar en conciertos nocturnos y componer.
Justo a principios de la semana, en la más reciente excursión de Xalapa a Ciudad de México, Mayer tocó con otros jazz cats. Y así comenzó una semana muy típica llena de espectáculos, clases magistrales, conciertos en bares y reuniones importantes entre jazzistas, propietarios de establecimientos y productores de música que, de muchas maneras, reflejan una especie de auge en la escena del jazz de la Ciudad de México.
Tim Mayer con la Orquesta de Profesores que dirigió Steve Turre en el Festival Internacional JazzUV 2019
El jazz como parte integral de la revolución cultural de la Ciudad de México
Hace solo unos años, la Ciudad de México fue seleccionada por el New York Times como la ciudad más deseable para visitar. La escena culinaria de esta la ciudad está en pleno apogeo y también ha ganado una buena cantidad de premios y reconocimientos. Nuevos restaurantes, bares y chefs internacionales vienen continuamente a la ciudad.
Después de años de servir en algunos de los mejores restaurantes de la ciudad de Nueva York, Angelo Pérez se dio cuenta luego de varios viajes a la Ciudad de México. Con un padre mexicano, Angelo pudo nacionalizarse con facilidad. En seguida decidió proponerle a su padre abrir un restaurante-bar en Ciudad de México, quien se sonrojó ante la sorprendente propuesta y se convenció fácilmente.
“He viajado por todo el mundo, pero no hay un lugar que me permita ser quien soy tanto como la Ciudad de México”, dijo Angelo.
Que un cantinero veterano nacido en los Estados Unidos prefiera emprender y abrir un restaurante en Ciudad de México y no seguir su oficio en los Estados Unidos, tiene mucho que ver con lo que está sucediendo aquí.
El Times se aseguró de observar cómo “los viajeros que buscaban algunos de los mejores restaurantes, museos y diseños innovadores del mundo” acudían a la ciudad en masa y disfrutaban “las mansiones de estilo francés del siglo XIX de La Roma o… [cerca] Parque México en la Condesa”, que son solo dos de los muchos barrios que, con frecuencia creciente, son los anfitriones del jazz en estos días.
El tremendo crecimiento que ha tenido la escena del jazz en Ciudad de México es parte íntima de lo que sucede de manera más amplia en la escena cultural de México en general.
El crecimiento exponencial del jazz en Ciudad de México
Es entre un descanso establecido durante una actuación de fin de semana y hablo con el propietario de Zinco, Ernesto Zeivy, así como con su ingeniero de sonido, Jorge Cruz, sobre la escena del jazz en la Ciudad de México. Ambos han sido testigos durante mucho tiempo de su desarrollo.
“Hace 20 años, no había tantos jazzeros, era como una escena muy, muy local,” explica Jorge Cruz a Contratiempo Jazz.
Y dio más detalles: el jazz, sin lugar a dudas comenzó a desarrollarse localmente. “Llegó gente de muchas partes de Latinoamérica: Chile, Argentina, Cuba, El Salvador…incluso llegó gente de Francia a vivir aquí y han hecho una escena muy efervescente de jazz,” continuó, con un notable tono de emoción en su voz al recordar lo lejos que ha llegado el jazz en la ciudad.
La creciente escena local de músicos de jazz profesionales ayudó a aumentar la audiencia local y viceversa, lo que finalmente llevó a lo que Eugenio Elías, nacido en Argentina pero residente en la Ciudad de México desde hace mucho tiempo, señaló como un momento crítico. “El cambio realmente comenzó a llegar cuando Wynton Marsalis llegó a la Ciudad de México en 2004 y tocó en Bellas Artes, Auditorio Nacional y en el Zócalo. En el Zócalo, asistieron 60,000 personas”, dijo Elías a Contratiempo Jazz.
Justo cuando la Ciudad de México comenzaba a experimentar un renacimiento cultural, el jazz también nació y se desarrolló allí.
Elías organiza, atrae y reserva a los músicos de jazz más importantes del mundo desde Nueva York a partir del 2013 en una serie llamada “New York Jazz All Stars”. La serie, que ahora se presenta en uno de los sitios acústicamente más avanzados del país, diseñado por arquitectos mexicanos líderes, ha sido un golpe cultural y una gran parte de lo que ha desencadenado aún más el crecimiento de la escena del jazz de la Ciudad de México.
“Hay dos tipos de espectáculos que forman parte de esta serie, increíbles o fantásticos”, bromeó un entusiasta Gerónimo Zordi después del concierto de Cannon, y se aseguró de decirle a Contratiempo Jazz que había asistido a casi todos los espectáculos sin falta durante toda la existencia de la serie.
Y, en efecto, la serie ha atraído a una gran cantidad de músicos de renombre mundial, incluidos Clayton Brothers, Aaron Diehl, George Garzone, Bruce Harris y Jeb Patton, entre muchos otros notables.
“Ha habido 180 conciertos de la serie, no solo en la Ciudad de México, sino también en Cuernavaca, Puebla, Torreón y hasta en Sinaloa algunas veces y clases magistrales en 6 estados de la República, lo que ayuda a profundizar la comprensión de lo que realmente es una disciplina musical clásica”, señaló con orgullo Elías.
Muchos de los jazzistas de la serie, y mucho más allá de esas esferas, también han bajado las escaleras hasta el sótano-bar de Zeivy, que atrae a artistas de gira de lugares tan remotos como Europa hasta una variedad de músicos de América.
“Cada vez es más notorio que músicos de Nueva York o Chicago vienen a México y están encantados de tocar aquí,” dijo Zeivy.
Aaron Diehl Quartet en el Ciclo New York Jazz All Stars
Una típica semana llena de jazz en Ciudad de México
El último sábado de octubre comenzó una semana llena de jazz que se está volviendo muy típica en Ciudad de México. El veterano músico de jazz y bajista Gerald Cannon dirigió una “clase magistral”, como es habitual para cualquier líder de banda que toque en la serie New York Jazz All-Stars de la ciudad de Nueva York. Cada banda que participa en la serie lidera una clase antes de pasar a tocar en el concierto por la noche en el local Roberto Cantoral, ubicado en Coyoacán. Al anochecer, Cannon dirigió un espectáculo muy bien recibido que terminó con una ovación de pie, lo que ocurre regularmente en otros conciertos de la serie.
Al día siguiente, Emmet Cohen, un pianista talentoso, joven y ya conocido en la ciudad de Nueva York, se reunió con Elías para hablar sobre una posible aparición en la serie para la próxima temporada 2020. Cohen acababa de tocar en el Festival Internacional de Jazz de Xalapa, organizado en gran parte por Mayer, y llegó con Mayer, el trombonista Steve Turre y un grupo de otros jazz cats.
Después de la reunión de Cohen con Elías, el joven pianista al anochecer golpeaba apasionadamente los riffs de neo-bop con un abandono imprudente y creativo junto con Mayer y nada menos que Tootie Heath, un legendario baterista de 84 años que también viajó en autobús a la ciudad. Heath, Mayer y Cohen estaban tocando en Pata Negra de la Condesa, que presenta actuaciones de jazz de forma regular.
Turre mismo es un ícono, ya que ha sido uno de los principales músicos de trombón y también radica en la ciudad de Nueva York desde hace décadas.
“Llegué a Nueva York por primera vez en 1973”, me dice Turre mientras disfruta de un plato de mole en Jazzatlán Capital, llenándose el estómago antes de una noche ocupada con dos sets programados.
Esto se debe a que Turre tenía un concierto allí, donde lideraba una banda improvisada y compuesta por Cohen, Mayer y John Webber (bajo) y Alex Kautz (batería). Elías se quedó a disfrutar ambos sets.
Steve Turre en el Festival Internacional JazzUV 2019
“La Ciudad de México tiene un montón de grandes espectáculos y jazz hasta el punto de que ha atraído actos de clase mundial, como este esta noche”, me dijo Elías momentos antes de que Turre comenzara uno de los dos sets en Jazzatlán Capital.
Y eso es exactamente lo que el propietario Rodrigo Moctezuma ha estado tratando de lograr en su lugar, que se ha establecido rápidamente como un importante recinto de jazz a pesar de haber sido fundado hace solo unos años.
Después de una actuación de un quinteto que nunca sabrías que se había montado solo unos días antes de la actuación, algunos integrantes de la banda salieron a comer tacos en Orinoco, una taquería nocturna conocida por los lugareños en la histórica colonia Roma.
“Sabes, cuando se trata de tocar jazz, en muchos viajes ganas muy poco dinero”, reflexionó Cohen mientras sus compañeros de banda Mayer y Cohen se limpiaban la salsa de la boca. Mayer y Cohen estaban disfrutando tanto de sus tacos que dejaron que Cohen hablara la mayor parte del tiempo.
“Todo lo haces por amor a la música, todo se trata de la música. Y de eso se trata jugar con estos gatos “, agregó Cohen.
Entre bocados, Mayer intervino y yo no podía estar más de acuerdo con él, “No entras al jazz para ser famoso”, reflexionó. Pero se aseguró de agregar también que no hay nada que le guste más que tocar en la Ciudad de México y coseche mucha más satisfacción al hacerlo que sus ya desaparecidos días en Boston.
El quinteto -formado específicamente para este viaje- de Turre pasó a tocar en el Zinco la noche siguiente, el miércoles, que culminó con una semana llena de estrellas de jazz.
Parte de la prensa cultural local se ha dado cuenta, pero en su mayor parte, la revolución del jazz de Ciudad de México continúa agitándose con poca o ninguna prensa internacional tomando nota.
Como tal, discreta pero consistentemente, la ciudad continúa atrayendo a músicos de jazz de clase mundial, quienes, más que nada, tocan en los principales lugares de jazz del país por amor a un género cuya historia y tradición es larga y profunda, al igual que las tradiciones culturales del país, así como la revolución cultural que está en marcha en la capital de la nación.
Si los músicos de jazz como Mayer siguen teniendo algo que decir sobre el asunto, el jazz continuará siendo una parte importante del renacimiento cultural de la Ciudad de México.
“Me encanta aquí”, dice Mayer, mientras termina el último de sus tacos a las 3 am. “Volveré a México la próxima semana para dar una clase magistral”, agrega Webber, quien agregó que su pareja es mexicana.
Si vas a comer tacos en la Ciudad de México en un sábado por la noche, es muy probable que te encuentres con Mayer, Webber, Cohen o cualquier otro jazz cat internacional después de uno de sus conciertos. Mientras tanto, y para el deleite de una cantidad cada vez mayor de fanáticos y seguidores, la marcha del jazz en la Ciudad de México continúa su carga por delante sin ningún fin a la vista.
El Dr. Andrew Kennis es un investigador académico y periodista internacional especializado en análisis de medios masivos. Dr. Kennis ha trabajado en periodismo profesional a lo largo de las últimas dos décadas y ha sido corresponsal fronterizo para teleSUR English y publicado en una variedad de fuentes de noticias, incluyendo Proceso, The Guardian, emeequis, VICE, The Christian Science Monitor, Al Jazeera English y Time Out, entre otros. Su trabajo lo ha llevado a entrevistas como experto en la televisión y radio nacional desde lugares ubicados en cuatro continentes y en más de veinte países de todo el mundo. Actualmente, radica en Ciudad de México y forma parte de un equipo de investigación en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales en la Universidad Nacional Autónoma de México y prepara un libro sobre Trump, movimientos sociales y medios masivos de próxima publicación con Routledge (2020).
{fcomment}